miércoles, 27 de julio de 2011

Hiromi (The Trio Project) XIV Festival Jazz San Javier (23-07-2011)

Para empezar a narrar el concierto de Hiromi Uehara voy a parafrasear a Joaquin Alfonso (@joaalf), escritor del blog VIPVAP, Cinema & Peace & Music: "Si no has ido a un concierto de Jazz, no has ido a un concierto", a la que añado: "y si no has ido a un concierto de Hiromi, no has ido a un buen concierto de Jazz hoy en día".

La enérgica Hiromi nos enamoró a las más de 1500 personas que asistimos a su concierto el pasado sábado 23, uno de los últimos conciertos del XIV Festival Internacional de Jazz de San Javier.
La japonesa sorprende, no sólo por su juventud y su maestría con el piano, sino por la facilidad que tiene para sentir y transmitir con sus pequeñas manos, por la facilidad para dejarte sin aliento cuando intentas seguir a sus ligeros dedos mientras ella sonríe y toca como si nada.

Esta vez (no es la primera vez que viene a San Javier) vino acompañada de dos auténticos monstruos que conforman su nuevo "Trio project", en la presentación del nuevo álbum Voice: el maestro a la batería Simon Philips y el genialísimo Anthony Jackson al bajo.

Las primeras notas de la primera canción nos dejaron claro que ibamos a ver aquella noche: un completo repaso a los mejores temas de su nuevo álbum.
Voice fue el tema elegido para abrirnos boca, con su inicio pesado, grave, que se abre poco a poco en un derroche de virtuosismo.
Destacable sin lugar a dudas el momento en el que el piano de Hiromi "baja de volumen" y la batería del gran Simon Philips se vuelve arrolladora, mas cercana a una bateria de heavy que de jazz, pero, con la cama del bajo de Jackson y las notas dulces del piano de cola se convierte en algo magnífico, una mezcla entre jazz, clásica y rock que me dejó con la boca abierta y la babilla colgando.
En directo mejora muchísimo, como era de esperar.

Ya en estos primeros minutos vimos que el trio se entiende a la perfección. La acústica del Auditorio era increible, aunque por poner una pega (que se deba seguramente a la ubicación que escogí en el recinto) el bajo de seis cuerdas de Jackson era engullido casi en todo momento por la energica forma de tocar de Hiromi.

Tras Voice Hiromi se puso de pie para recibir el aplauso del público, cogió el micrófono nos dió la bienvenida y nos presentó su siguiente tema: Now or never.
Now or never
es uno de los temas que más me llamó la atención cuando, muy de pasada, escuché el disco antes de ir a verla. Es un tema tremendamente divertido, en el que al principio alterna la majestuosidad de su piano con el toque divertido de su Nord Lead. Cuando se centra exclusivamente en el piano, llega un momento en el se deja llevar totalmente y vive la música como solo ella sabe hacer: dando patadas y saltitos mientras toca el piano y alcanza una velocidad, seguramente, muy próxima a la de la luz.
Lo mejor del tema, sin lugar a dudas, las imitaciones que hacía Hiromi con su sintetizador de las notas que tocaba Anthony Jackson en su bajo (en el video, en el minuto 7:39)

Video del festival Heineken Jazzaldia, celebrado el 24 de Julio, un día después del concierto de San Javier. El video pertenece a Distrito Jazz

Y... ¡otro temita del nuevo! Desilusion es toda una delicia, con un estribillo algo nostálgico y mágico.
Es el tema quizás más sobrio, y el piano de Hiromi deja brillar por fin a Anthony Jackson, cuyo bajo adquiere un protagonismo en la distancia y da una clase especial al tema. A mitad del tema, bajo la oscuridad machacona de Jackson y el piano moderado de Hiromi aparece el ritmo intenso del espectacular doble bombo del gran Simon Philips que resuena por todo el Auditorio y hace que el público rompa en aplausos
Labyrinth, fue otro derroche de virtuosismo y rapidez. Pese a que parece que es un tema más pausado, las pequeñas manos de la japonesa recorrian el piano alcanzando velocidades alucinantes, embobando al público y dejando nuestros corazones al borde del infarto por tratar de amoldarse a semejante ritmo.

Beethoven's Piano Sonata No. 8, Pathetique baja definitivamente el ritmo del concierto. Es hora de tomar un respiro, y disfrutar de forma pausada de la gran versión del maestro que nuestra querida Hiromi nos regala.
Y tras recibir los aplausos, Hiromi se queda sola en el escenario y nos toca una de las canciones más íntimas de su nuevo disco: Haze, un estupendísimo trabajo con el que hizo que el público contiviese la respiración para saborear la mágia y la serenidad que sudaba cada nota que los dedos de Hiromi acariciaban.
Fue un tema muy aplaudido, el público se puso en pie aplaudiendo emocionado mientras que Jackson y Philips volvían al escenario para continuar.


Y, un cambio de ritmo total, Dancando No Paraiso, de su disco Another Mind en el que el trio nos contagió las ganas de bailar (o mover la cabeza y el piececillo, que estabamos sentados). Nuevamente Philips e Hiromi suben la velocidad y se nota la química especial entre ellos, lo bien que han congeniado, lo bien que acompaña una batería de corte más rock con el piano maravilloso de la japonesa. Dejan el tema a medio, e Hiromi se pone de pie y se coloca junto a Jackson para contemplar de primera mano el fabuloso solo de batería de Simon Philips.

En definitiva, Hiromi fue una niña prodigio, alumna de Ahmad Jamal y Oscar Peterson... y el sábado en San Javier nos demostró que a sus 32 añitos ya tiene todas las papeletas para conventirse en una leyenda del Jazz de nuestros días. No sólo se muestra como una virtuosa, sino que vive y siente cada nota. Su carisma y su entusiasmo se contagian por vía de su expresión corporal, y su sonrisa y su alegría nos hacen entender que pese a su profesionalidad y maestría, para ella no es solo lo que le da de comer, sino que es su vida, su hobbie, su pasión. Hiromi es música. Hiromi es Jazz... otra forma de entender el Jazz... y con este nuevo trío, la perfecta unión entre tres cunas del Jazz (Nueva York, Londres y Japón) nos convenció absolutamente de que ante su presencia solo podemos aplaudir y admirar el derroche de talento que regala a quien se atreva a escucharla.

Espero que vuelva en próximas ediciones del Festival de Jazz de San Javier, porque todas las veces que vuelva yo volveré a repetir.

4 comentarios:

  1. Yo también estuve allí y fue tremendo. Por mucho que yo ya hubiera flipado antes con sus discos, el concierto fue increíble. A partir de "Haze" fue un "no quiero que termine esto nunca".

    Yo destacaría más el solazo que se marcó el batería. Por lo demás, buena crónica :)

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  2. Por cierto, echándole un ojo a tu blog (que te animo a que sigas con él) creo que te gustaría una pequeña entrada que escribí hace un tiempo basada en un tema de Pink Floyd: http://lasendaamartillazos.blogspot.com/2009/08/careful-with-that-axe-eugene.html

    Un saludo.

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  3. Muchas gracias por la visita y sus palabras!
    Lo cierto es que fue un concierto inolvidable... el tiempo voló aquella noche en San Javier.
    Iba a escribir también sobre Lucky Peterson... pero entre que desconozco su discografia y que el concierto era más de su esposa que suyo al final no acabé por decidirme a mencionar nada.

    Ah! Y enhorabuena por tu blog! He estado repasandolo también y escribe usted de lujo.
    Sea que sea de lo que hables, acaba enganchando!

    Un saludo, Ethos

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  4. Gracias por tus palabras aquí y en mi blog. Algunas veces es un soplo de aire fresco que alguien te diga que le gusta como escribes (y la verdad es que me iba haciendo falta un poco). Gracias otra vez.

    Te puedes ahorrar hablar de Peterson: es cierto que dio espectáculo, pero para ser un "maestro de hammond" y para estar en el festival que estaba me defraudo mucho. El sonido se le fue de las manos todo el concierto y abusó demasiado del vibrato del ampli. Pero bueno.

    Espero que actualices pronto. Me pasaré por aquí (ah, y no me trates de usted, por favor, que no tengo tantos años).

    Un saludo, Sekhmet.

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